De todos modos, nadie debe sentirse superior a nadie. Como dice la célebre frase de la obra maestra Old Boy de Park Chan-Wook: "sea un grano de arena o una roca, en el agua se hunden igual". Y es que hay determinados actos que, aun con diferencia en su dimensión, tienen al final la misma consecuencia.

Supongo que, de alguna manera, el séptimo arte transmite las cualidades humanas de sus genios. Y se me viene a la cabeza la perfección de Kubrick, la intriga de Hitchcock, el ingenio de Chaplin, la curiosidad de Nolan, la claridad de Eastwood o la innovación de Kurosawa y Spielberg. Y no se me echen encima fanáticos de otros genios porque estos son solo algunos ejemplos.
A mí me da mucha pena la pérdida paulatina del clásico visionado en sala de cine. Hoy día con un presupuesto relativamente modesto todo el mundo puede montarse su propia sala en casa. Sírvanse de una tele grande y una barra de sonido o "home cinema", las películas a la carta, y ya está todo hecho.
Es una realidad. La sociedad evoluciona y hay que saber adaptarse. Y el que no lo hace sencillamente muere. Grandes compañías de sectores tradicionales deben saber dar la mano al cambio y caminar juntos. No quiero empezar a divagar, sobre esto podría estar hablando horas, pero solo digo que aquel que no ande se cansará de permanecer de pie.
Y se lo dice una antigua entrada de cine, concretamente de La Mosca de Cronenberg. Cada nueva compañera que llega al álbum es recibida con júbilo y alegría, somos una gran familia. Haya los cambios que haya a nuestro alrededor, nosotras permaneceremos en el tiempo tal cual vinimos al mundo. ¡Y espero que sea por muchos años!
1 comentario:
No hay nada como disfrutar de una película en la gran pantalla.
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